El portal del tiempo consta de cinco arcos de madera a diferentes alturas, que sostienen cortinas hechas de hojas y aceitunas en cemento blanco.
Esta instalación de arte conceptual busca hacer reflexionar al espectador sobre el paso del tiempo, los recuerdos y el transcurso de la vida. Las hojas suspendidas, como vivencias que vamos dejando atrás, que se enredan y necesitan de la ayuda de los demás para enderezarse de nuevo, y el crecimiento personal a través de la altura de los arcos.